La estela de tus alas
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| Rincón. PR. (Eric N Alvarez © 2025) |
con el impulso de los delirios
y de los laberintos oníricos
esta madrugada navegué
en un bote despintado
y sin ambiciones
los fiordos de Vancouver
los canales de Amsterdam
y Venecia
todos en entredicho
manojo de incertidumbre
ante el retorno de los océanos
viajé en mi bote sin metáforas
los tributarios del Orinoco
y el Amazonas
acaso fui arrastrado
por el caudaloso Nilo Azul
y alcancé las corrientes infinitas
del Nilo Blanco en camino
al Mar Mediterráneo
tú no estabas
[ahora alertas al guiño
que alude al hoy conocido
y evidente]
¿cómo habrías de estarlo
como lo estás en el presente
en esta dimensión
que imaginamos conocer
en las galaxias
de la subconsciencia?
cómo podrías estar
en los circuitos oníricos
de mi locura de los polos opuestos
entre su benevolencia y sus miedos
cómo podrías estar
en los enfermizos ritos lúdicos
de mis sueños y mis premonicones
de la temporalidad humana
y de este planeta que ha existido
durante siglos de extinciones
y horrores determinantes
sobre esos períodos
sobrevolamos
desde nuestro ayer de hoy
y a partir de nuestra memoria
del primer intercambio
de nuestras miradas
en una playa de cristal azul
de embarcaderos y caracolas
de algas alimentantes
de peces innumerables
habida cuenta de las circunstancias
de mi espíritu y el mundo en que habita
por qué aquél Dios o yo
deberíamos hacerte parte
de un universo por desaparecer
convertido en partículas cósmicas
enlazadas como cuerdas
y dispersas en imágenes
que solo en mi interior habitan
hoy nada es como fue
hay escombros sobre difuntos
regados en diferentes puntos
de los universos
hay aquellas ánimas
sin vocación de regreso
escapando veloces
fugitivas de la vida
bajo lluvias incesantes
que continuarán
durante millares de años
navego sin destino predispuesto
sobre un bote sin redes
mi alma trashuma en mi memoria
entre sueños y delirios
vagando en el recuerdo alucinado
de tu piel firme y tersa
de tus labios húmedos
sobre mi cuerpo traslúcido
y tu lengua invasora
dentro de mi boca
mi bote y yo
en todo caso somos
niebla en un mundo onírico
en donde tú siempre
donde quiera que estés
le harás falta
y le serás necesaria
a todos los universos paralelos
y posibles
no debo decirlo
para no exponer frágiles
los anhelos y la inocencia
sin embargo
para que tú no faltes
y estar seguro
sé que navegaré
todos los canales
y sus mares
desde el pasado hasta el futuro
tras la estela dejada
por tus alas luminiscentes
en la superficie de los océanos
cuando te sumerges
sensual y violenta en sus abismos
y emerges oleaje
en la voraz entrega de las pasiones…
(Todos los derechos reservados.
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