Seres imaginarios en un mundo que arde en llamas
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| Eric N Alvarez © 2024.07.07 |
Cada vez que te alejas
y te sumerges en ese mundo paralelo
que desconozco
es como si te llevaras enredado en tu cuerpo
un año que podría ser
el año 19, o el 21 o cualquiera otro
con sus discursos ambivalentes
con sus verdades imaginadas…
Pero cada una de esas veces cuando te alejas
la realidad irrumpe aún más frecuente
y cada vez más intensa en mi mente
con un golpe de trueno
—ya sabes— como un delirio que estalla.
Golpe de trueno
delirio que estalla
rayo de luz que divide el cielo nocturno en pedazos
la realidad no solo irrumpe con la fuerza de su violencia
sino que toma control de mis pensamientos
en una carrera acelerada
en la que se enfrentan mis ideas
mis emociones y mis convicciones;
dejo atrás las cómodas y más fáciles premisas
los más dóciles paradigmas
enfrento el caos y asumo el conflicto
con todo lo que pienso sobre mi propio ser
sobre mis actos
sobre mi mortalidad inevitable y absoluta
sobre ese particular personaje que uno llama "uno"
y que trasciende mi individualidad elemental.
No es el año 18, ni el 19, no es el 21, ni el 23, ni ninguno otro;
nada existe como tiempo fijo y permanente en la dimensión presente;
al alejarte no te has llevado ningún año
ni te has llevado aquellas cosas que pudieran ser recuerdos
porque cada día soy yo el que se aleja
como una barca sin navegantes río abajo;
deshago mi existencia cada día
y me despojo de este “yo” cuestionable
en la realidad de mis circunstancias
donde no hay espacio para recuerdos.
En la virtualidad de la objetividad concreta
tú y yo podemos ser una ideación
seres concebidos desde nuestra imaginación
más íntima y escondida
para fatigarnos de hacer el amor
mientras afuera
con sus golpes de truenos
y sus delirios explosivos
solo hay un mundo que arde en llamas
y nada más…
que desconozco
es como si te llevaras enredado en tu cuerpo
un año que podría ser
el año 19, o el 21 o cualquiera otro
con sus discursos ambivalentes
con sus verdades imaginadas…
Pero cada una de esas veces cuando te alejas
la realidad irrumpe aún más frecuente
y cada vez más intensa en mi mente
con un golpe de trueno
—ya sabes— como un delirio que estalla.
Golpe de trueno
delirio que estalla
rayo de luz que divide el cielo nocturno en pedazos
la realidad no solo irrumpe con la fuerza de su violencia
sino que toma control de mis pensamientos
en una carrera acelerada
en la que se enfrentan mis ideas
mis emociones y mis convicciones;
dejo atrás las cómodas y más fáciles premisas
los más dóciles paradigmas
enfrento el caos y asumo el conflicto
con todo lo que pienso sobre mi propio ser
sobre mis actos
sobre mi mortalidad inevitable y absoluta
sobre ese particular personaje que uno llama "uno"
y que trasciende mi individualidad elemental.
No es el año 18, ni el 19, no es el 21, ni el 23, ni ninguno otro;
nada existe como tiempo fijo y permanente en la dimensión presente;
al alejarte no te has llevado ningún año
ni te has llevado aquellas cosas que pudieran ser recuerdos
porque cada día soy yo el que se aleja
como una barca sin navegantes río abajo;
deshago mi existencia cada día
y me despojo de este “yo” cuestionable
en la realidad de mis circunstancias
donde no hay espacio para recuerdos.
En la virtualidad de la objetividad concreta
tú y yo podemos ser una ideación
seres concebidos desde nuestra imaginación
más íntima y escondida
para fatigarnos de hacer el amor
mientras afuera
con sus golpes de truenos
y sus delirios explosivos
solo hay un mundo que arde en llamas
y nada más…
Eric N Alvarez © 2024.07.07
@eralvz
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