Distorsión tóxica y humillación desde los medios de comunicación

Imagen según publicada por Stewart Hodgson en la página Fabrik, en el artículo
Video killed the radio star – or did it? Why radio still has a part to play in marketing.

Puerto Rico se ha convertido en el paraíso de la humillación bully rated, la difamación, la distorsión, y la discusión tóxica y farandulera, por parte de personas ebrias de su alcance a amplios sectores de la población a través de los medios de comunicación.

Ya Kobbo Santarrosa ha demostrado en el pasado todo lo que se puede lograr al respecto, pero no hay duda de que los módulos previos de mediados y, sobre todo, de fines del siglo 20, demostraron que la sátira y elmorbo son mecanismos efectivos de comunicación y manipulación del público. 

Lo que ocurre es que aquellas cuidadosas maneras del siglo pasado se convirtieron, con Santarosa como puente, en la utilización burda y vulgar del derecho a la libre expresión con fines de la obtención de ganancias en la industria del show televisivo o radial.

Los “talentos” a cargo de estos shows, a falta de algo inteligente que decir -aunque pueda (y deba) ser satírico o mordaz-, acuden al recurso de ventear las desagradables, o incluso involuntarias, deposiciones humanas, amparados en la laxitud del concepto de figura pública, y aprovechando el temor de sus víctimas a reclamar sus derechos, por razones de desconfianza en el estatuto legal de la sociedad. 

Se tomará así avance de la ansiedad de los afectados ocasionada por la posibilidad de verse involucrados en procesos que pueden terminar, muchas veces, enredando aún más los hechos. 

La libertad de expresión es un activo fundamental. Puede ser utilizada por quienes tienen el control de un medio de comunicación de masas, así como quienes no tenemos el privilegio del acceso a ese tipo de instrumento, por supuesto.

A lo que no debe haber cabida es a su utilización para el hostigamiento y la difamación. Desde luego, la respuesta a estos actos no necesariamente debe producirse en los mismos foros, siendo el de los tribunales el más importante. Aún.