Cada día renaces
juegas con la muerte
te entretienes agarrándola
provocándola con tus manos
que la deshojan como a un libro
al que es preciso arrancar sus páginas
para que vuelen entre Montparnasse
Champs-Elysées y Montmartre
entre los viejos callejones
vestidos de burdeles
de un París cuestionable
a estas alturas de la historia humana
juegas con la muerte
y le agarras su cabello liso y lo enredas
para no dejar que su rastro lineal
marque el rumbo de quienes
marchan tras tus pasos ardientes
juegas con la muerte
y te propone alianzas que rechazas
tú en cambio instalas rosas violetas
frente a la mirada desquiciada
de quien no comprende
la fragilidad de sus victorias
juegas con la muerte
con la fuerza de la vida
juegas con la muerte
y tus juegos son golpes
de un mar violento
contra un acantilado
que inevitablemente cederá algún día
juegas irreverente con la muerte
y todo el universo gira en torno a tí
juegas con la muerte
y no te importan el tiempo
ni las distancias
juegas con la muerte juegas
y sabes que cada día
que cada día que pasa
mueres
y que cada día que mueres
renaces
en la luz de las estrellas inacabables
en la luz de los recuerdos
infinitos y apasionados
en tu luz solar y definitiva…
Eric Alvarez © 2012. Todos los derechos reservados.
Comentarios
Saludos desde Los Angeles. Buscando noticias sobre el fallecimiento de Mara encontré tu blog. Wow parece que fue ayer que estábamos en Cervantes. Un abrazo hermano, por ahí te vendré a visitar mas a menudo.
Ramon Melendez
Eric (de Palés Matos, no de Cervantes, ese era territorio tuyo, de Cuqui, y Féliz... Gente buena!!!)